La Mostaza a la Antigua Moek se caracteriza por sus notas dulces y frutadas de la pimienta rosada, la suavidad y sutiliza del vino blanco y por su textura semi granulada, donde los pequeños granos amarillos y negros permanecen casi intactos, creando una sensación táctil que resalta la autenticidad y el carácter artesanal de este condimento, transportando a los comensales a tiempos culinarios más tradicionales.